lunes, 8 de enero de 2018

Cuando intentas ayudar a los demás, pero no puedes.

CUANDO INTENTAS AYUDAR A LOS DEMÁS,
PERO NO PUEDES.



En la vida, muchas veces me encuentro con dificultades porque quiero conseguir cosas, pero luego me falta o la valentía o la falta de voluntad para hacerlo o para buscar los medios.

Uno es consciente y piensa, si me pasa eso voy a tratar de poner soluciones, además se que no estoy sólo, pues no soy la única que persona que le pasa eso, a muchos de mis amigos también les pasa. 

Es en ese momento cuando pienso voy a ver que medidas puedo tomar para mejorar y voy a compartirlas para de paso ayudar al que quiera hacer ese camino conmigo, de intentar mejorar las cosas.

En las primeras personas que te vienen a la mente ayudar es a lo familiares y amigos. Piensas que como están más cerca y los conoces mejor, será más fácil ayudar.

Bueno pues ya que decido ayudar a mis amigos, lo primero es saber quien es tu amigo. Un amiga me dijo una verdad enorme; que muchas veces confundo amigos con compañeros y conocidos. Que pienso que son mis amigos y que en verdad no lo son porque no se preocupan por mi ni nada. Simplemente son gente con la que hablo en el momento, en el trabajo o donde sea, pero que luego adios y ya ni se acuerdan.

Si quedas con una persona, que desde el minuto uno lo que hace es hablar de ella misma, o quejandose de que mal le va todo o que es el mejor en todo, pero ni una sola vez te ha preguntado que tal estás ni se a precupado por ti (tambien tienes que hacerlo tú), entonces ese no es un amigo.

Afortunadamente, si tengo amigos y amigas que se preocupan por mí , me preguntan que tal estoy y me proponen hacer cosas, hasta me abren las puertas de su casa. Doy  gracias porque estas personas estén en mi vida y intento corresponderlas de igual manera.

Pero vamos a las tres grandes dificultades que he encontrado a la hora de intentar ayudar a las personas.

El pasado:

Hay personas que lo único que hacen es estar contemplando las 24 horas el pasádo. Cada vez que quedas te cuentas lo muy infelices que fueron en el pasado, como todo lo que les sucede es porque fueron muy pobres en el pasado, lo pasarón muy mal, les hacian bulling, les maltrataban, no tuvieron oportunidades, siempre tuvieron muy mala suerte, una antigua pareja del pasado les hizo mucho daño, pasaron por experiencias traumáticas o más cosas que les ha llevado ahora a sentirse como unos desgraciados.

Es curioso, casi siempre el pasado es culpa de los demás o de las circunstancias, pero nunca de uno propio.

Por raro que parezca hay personas que te cuentan todo lo contrario. El pasado eran felices, todo les iba bien y no se tenían que preocupar de nada, no tenían desgracias, cuando eran niños erán felices, pero ahora que son mayores todos son desgracias y piensan que los momentos felices forman parte del pasado que no volverá.

A todas esas personas le diría que dejen de llorar sobre el pasado. No me importa el pasado de nadie, no pretendo ser insesible ni faltar el respeto a nadie, pero como anécdota puede estar bien. Pero estar contemplando o culpando el pasado tiene tres dificultades importantes.

  • No somos objetivos a la hora de analizar el pasado: Nuestra visión del pasado depende de como nos sintamos en el presente, no lo mirás de igual manera si te sientes feliz o si te sientes desgraciado.
  • El pasado no se puede cambiar: El pasado es algo que ya ha terminado por tanto nos guste o no ya no se puede cambiar, por lo tanto demoslo por terminado. 
  • Es una perdida del tiempo presente: Si nos pasamos el presente lamentando el pasado no cambiamos el futuro.
La actitud en el presente.

Hay personas que repiten como un mantra que son unos desgraciados, que todo les va mal, que solo se fijan en las malas noticias y sin querer etán atrayendo esa mala suerte a sus vidas. 

Si te mueves en un ambiente de desgracias no puede sonreirte la fortuna, a veces es necesario romper con todo. Si toda la vida has hecho las cosas de la misma manera y te ha ido mal, quizas es hora de cambiar la forma de hacer las cosas.

Me he encontrado casos en que una persona te dicen, muchas veces que ha pensado en el suicidio, entonces les digo " - Puesdejalo todo y largate" y te responden, "- que fácil lo ves todo, eso no se puede hacer" y me pregunto ¿acaso no iba hacer lo mismo suicidandones? ¿entonces que pierde? 

Hay gente que es muy comodona, ya les va bien estar quejandose siempre, pero no tienen la suficiente valentia para arriesgarse a cambiar las cosas.

No han pedido mi ayuda.

Tiendo a pensar que la gente cuando te cuenta un problema es para que le ayudes, y no siempre es así.

Hay gente que cuando te cuenta un problema, no lo hace buscando ayuda. Simplemente lo que quiere es desahogarse. Aunque parezca contradictorio, hay gente que es feliz así. No quieren solucionar sus problemas, no quieren mejorar, simplemente lamentandose y quejandose ya son felices. Con desahogarse de vez en cuando y no haciendo nada ya les va bien.

No cuentan las cosas para empezar un diálogo , simplemente les encanta el monólogo que consiste en quejarse y ya está. No hace falta ni que digas nada.

Lo que pasa que a la larga esa gente acaba cansando o te acaba arrastrando a la miseria y eso no es bueno.

Bueno resumiendo, quien quiera mejorar las cosas y ser feliz adelante, quien quiera seguir lloriqueando del pasado y presente adelante. 

Quien necesite mi ayuda la tendrá y recibiré de igualmanera su ayuda.

Gracias por leeerme y espero que todos seais muy felices.





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